viernes, 29 de noviembre de 2013

Patrimonio olvidado, Estacion de Las Cejas.

Viernes 29 de Noviembre de 2013.

Por jlt.




PATRIMONIO CULTURAL.- La estación de Las Cejas está incluida en la Ley provincial de patrimonio cultural, N° 7535, sancionada el 15 de julio de 2004, promulgada el 1 de abril de 2005 y publicada el 8 del mismo mes. No obstante a ello el edificio se deteriora y nadie hace nada para conservarlo. Las Cejas se ubica 54 km al este de San Miguel de Tucumán. Tiene como vías de acceso a las rutas provinciales N° 303 y 345.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/570264/lectores-periodistas/patrimonio-olvidado-estacion-cejas.html

El tren era la vida para la bella estación de la ex aldea Santillán (Muñecas)

Viernes 29 de Noviembre de 2013.

Alberto Horacio Elsinger
LA GACETA
aelsinger@lagaceta.com.ar

MUÑECAS

Fue una estación de trascendencia. Fundada en 1898 por el Ferrocarril Central Norte. Hoy sólo es escombros. Tenía doble vía: una perdura.

DOS CARAS. Una edificación majestuosa que ya no existe.


El poeta, crítico, editor y diplomático estadounidense, del movimiento romántico, James Russell Lowel (1819-1891), solía afirmar que "los humanos no saben lo que poseen en la Tierra. Será porque la mayoría no ha tenido ocasión de abandonarla y regresar después a ella".

El controvertido autor de "Una fábula para críticos" (A Fable for Critics), un largo poema satírico contra escritores y poetas contemporáneos, diría exactamente lo mismo si hubiera nacido y vivido en Villa Muñecas. La estación de la ex Aldea Santillán, una de las más importantes paradas ferroviarias del troncal C del ex Ferrocarril Belgrano y poseedora de uno de los edificios de dos plantas más atractivos de la provincia, fue depredada y aniquilada. Hoy sólo es un montón de escombros y su predio fue ocupado por un asentamiento, que día a día, usurpa más terrenos lindantes a los rieles.

Terminal intermedia

Muñecas, ubicada en la intersección de Viamonte y avenida Francisco de Aguirre, fue una terminal intermedia de intenso movimiento, cuyo edificio se construyó en 1898. Tenía dos vías principales, para realizar el cruce de las formaciones, que llegaban hasta el Empalme Centenario. "Allí una se dirigía a El Bajo; otra, que pasaba por debajo del Puente de los Suspiros, se metía a la estación Sunchales del ex Mitre y una tercera, que aún se mantiene, hacia el ex Central Córdoba. También salía desde Muñecas un desvío a San José, que pasaba por detrás de la Sociedad Rural y allí se bifurcaba hacia los cuarteles del Ejército y hacia Yerba Buena. Por las llamadas diagonales estaban los terraplenes con las vías, en la ciudad jardín", describió Fernando "Cacho" Sosa, de 73 años. El hermano menor de la entrañable Mercedes Sosa reside, desde 1950, en una casa de lo que antes se conocía como Muñecas Norte -pasando las vías está Muñecas Sur-, frente a la ex playa de maniobra, los galpones para reparaciones, el tanque de agua, la mesa giratoria y la báscula para cargas. Estos últimos ya no existen.

Sin vestigios

"Cacho" Sosa, quien reconoció que su padre Ernesto "Tucho" Sosa fue ferroviario, destacó que "la playa de maniobras para armar las formaciones de cargas -hoy no hay vestigios- incluía aproximadamente de diez a doce vías. Había un gran movimiento de vagones. Por acá también estaba El Brete, que se extendía entre la Azcuénaga y Sargento Cabral, donde se alimentaba el ganado, que llegaba en vagones jaula y luego se cargaba a camiones para el traslado a las bocas de consumo. También se cargaban los animales para continuar el largo viaje hacia el norte del país".

OTROS TIEMPOS. La estación Muñecas en plena actividad. A partir de 1990 comenzó su depredación y ruina.


"La estación Muñecas fue parada obligada de muchos taficeños que viajaban en el tren local", contó Carlos Coronel di Fazio, de 62 años.

Varios servicios

Coronel, es un apasionado de los ferrocarriles. Sin bien es cierto que trabajó en el policlínico ferroviario de Junín y Sarmiento, su afición a la fotografía ferroviaria, lo lleva a las viejas estaciones, ramales y a los talleres en particular, como focos de su afición. Tanto que les dedicó un página web. Se crió en Tafí Viejo. Incluso la educación primaria cursó en la vieja escuela Mitre. "Solía viajar en el local que salía de la ciudad taficeña hasta la capital. La diagonal, por entonces, era un sendero. Mi esposa es de Villa Muñecas. Cuando éramos novios varias veces tuve que volver caminando a Tafí Viejo. Me pasaba el último servicio. Y todo por un beso más. En la estación Muñecas había una manga de alambre tejido con piso de polvo de ladrillo. El tren era la vida, además del obrero, había entre doce y once servicios por día. Una vez, en 1978, cuando salía el último servicio, no quise viajar. Pero ahora no veo la hora que vuelvan" dijo entusiasmado.

INAMOVIBLE. Fernando "Cacho" Sosa, peluquero y residente fiel de Muñecas, al frente de los galpones. LA GACETA / FOTOS DE ANALIA JARAMILLO Y GENTILEZA DE CARLOS CORONEL.


Hace cuatro años -18 de junio de 2009- y después de 32 años volvió a pasar por Muñecas un tren de pasajeros. A la misma vez, carros tirados por caballos se llevaban ladrillos, marcos de puertas y ventanas de los que fue un majestuoso edificio de dos plantas construido a fines del siglo XIX.

Desde el andén

Doble.- La estación de la ex Aldea Santillán tenía andén doble. Uno que comprendía la galería, las boleterías y la sala de espera. Otro, denominado isla, donde hoy está una casa sencilla que pareciera del ferrocarril por su característica galería con cenefas caladas y columnas de hierro. "Esa era la casa del cuidador", dijo Carlos Coronel (foto).

DESCUIDADA. Un carguero diario atraviesa las vías de Muñecas. Pero la usurpación y el abandono no tienen fin.


Advertencia.- En 1995, LA GACETA advertía sobre la preocupación de los vecinos. Sin el tren, la estación estaba siendo ocupada a la noche por malvivientes. En esa época todavía había un jefe y un empleado durante el día. Pero en 1998 a la estación ya la habían ocupado cinco familias. El edificio todavía estaba en pie y había un par de vagones abandonados. Tres lustros más tarde, todo terminó.

VESTIGIO. La casa del otrora cuidador, hoy ocupada, es la única edificación ferroviaria en el lugar, además del riel.


Biblioteca.- Un lugar de relevancia y representativo de la vida social de Muñecas es la biblioteca popular Miguel Lillo. Un grupo de vecinos la fundó en febrero de 1929 y se llamaba Unión Ferroviaria. En 1938 le cambiaron a su actual denominación. En este local también se realizaban bailes populares y reuniones sociales muy concurridas. Incluso hasta llegaron a exhibir filmes clásicos y de estrenos.

DOS CARAS. Una edificación majestuosa que ya no existe.


Recuerdos.- La cooperativa ferroviaria (F. de Aguirre 3223), el almacén de ramos generales, próximo a la estación; la carnicería y chacinería de Justo Fernández y El Candado, el billar de Isabel la Católica y Visconti aún viven en la memoria del barrio.

UNA COPIA FIEL DE LA ESTACION CEJAS En pocos años, la estación Muñecas fue reducida a escombros, ante la pasividad de los responsables de su conservación. Curiosamente, el edificio de Muñecas figura dentro del listado de bienes integrantes del Patrimonio Cultural de la Provincia (Ley 7.535, sancionada en 2005). El inmueble era una copia fiel de la estación de Las Cejas, que afortunadamente aún sigue en pie. La estación se extendía de Emilio Castelar a Francisco de Aguirre, entre Castro Barros y Ejército del Norte.





Angel Bachi · 29 de Noviembre de 2013.
me llena de nostalgia leer esta nota ya que viví en el barrio esteban Echeverría toda mi infancia a pocas cuadras de la estación, la verdad, lamentable y repudiable lo que hacen las autoridades con reliquias como estas,

Jorge Doval Rivera · 29 de Noviembre de 2013.
Y pensar que estos recuerdos, parecería trasladarnos a la época de las colonias cunado en realidad, solo han pasado unos pocos años. Fue a partir en la época en que la pobre mente de un "sapo Riojano", destruyó el ferrocarril, aduciendo que daba pérdidas. No se dio cuenta que con ello, mataba la historia misma de un País y sus poblaciones. Como efecto colateral, posibilitó el advenimiento de ese tipo de "cucarachas" que todo destruyen. Siendo de origen Bonaerense, casado con una Tucumana de primera sepa, Me congratulaba viajar en el "Estrella ddel Norte" disfrutando del aire con olores a campo y hierro que se filtraba por las ventanillas, mientras disfrutaba las chacareras y zambas entonadas por algún Santiagueño compañero de viaje. Y i que hablar de la parada de Herrera, con su música de "catitas, quesillos, cafe.....".Hoy al pasar un mal servicio ferroviario, solo los fantasmas de una época nos reciben.

aladelta_25954 · 29 de Noviembre de 201.
Menen lo hizo!!!

Carlos_Coronel · 29 de Noviembre de 2013.
Estacion Muñecas, que imponente eras cuando funcionabas a full, tenias unos jardines con rosales y camineria de polvo de ladrillos, su sala de espera, de piso calcáreo color rojo reluciente, en el centro del edificio que tenia su entra y salida sin puertas que comunicaba el Anden con la avenida Francisco de Aguirre, donde estaban las casas de Villa Muñecas (Norte, porque la via dividia a Muñecas en Norte y Sur), la cooperativa, un gran jardin de unos 40 o mas metros con palmeras y grandes arboles para sombra, solo sobreviven las 2 centenarias palmeras, había consultorio médico y un edificio de la Policia Federal Ferroviaria (que falta hace ahora que la custodia esta en una empresa privada). Estación Villa Muñecas simpre te tendre presente, por alli pase mi niñez, viendola desde las ventanillas de los trenes locales, mi juventud, mi novia, enfin era una Estacion unica en la zona de 2 plantas, y los mismos ocupas se dedicaron a destrozarlas para vender sus partes por unas monedas,

becor · 29 de Noviembre de 2013.
Juro que se me pianto un lagrimon! A pesar de ser joven, tengo tantos recuerdo en esa estación, pasaba cada fin de semana por ahí, para llegar a casa de mi abuelo, y juro que lo que mas me gustaba era esperar en el fondo de su casa para ver pasar el tren. Una verdadera lastima la desidia de muchos. Excelente la nota

Circe_cefalea · 29 de Noviembre de 2013.
Gracias por esta nota, por las imágenes. Provoca una gran tristeza semejante decadencia, no sólo en el aspecto material, que es visible, sino en el profundo desprecio por parte de nuestros gobernantes hacia algo tan medular como el ferrocarril, que se refleja en cada estación ocupada por la pobreza imparable que nos asola. Qué tristeza.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/570171/sociedad/tren-era-vida-para-bella-estacion-ex-aldea-santillan.html

viernes, 22 de noviembre de 2013

Made in Tucumán: El incomparable tren presidencial de trocha métrica

22 Nov 2013.

Alberto Horacio Elsinger
LA GACETA
aelsinger@lagaceta.com.ar


El convoy de tres coches y una locomotora a vapor no sólo se construyó sino que también se diseñó en los talleres ferroviarios del ex Central Córdoba y de Tafí Viejo. Se fabricó con el máximo lujo y confort. El primer viaje fue en 1912.

DE COLECCION. El coche G2 posee un comedor imperio para 32 personas, distribuidas en ocho mesas de dos y cuatro asientos, respectivamente, y otro privado para sólo seis personas.


Se construyó en Tucumán y lo estrenó un salteño. Pero la fabricación del tren presidencial de trocha angosta fue iniciativa de un abogado y político cordobés, que ocupó la cabeza de los tres poderes del Gobierno Nacional, en distintos períodos. El doctor José Figueroa Alcorta, por entonces primer mandatario de los argentinos, autorizó -en 1908- a Ferrocarriles del Estado a fabricar un tren especial para uso exclusivo de la Presidencia de la Nación.

El ingeniero Manuel Tedín, que ocupaba la cartera nacional de Obras Públicas, delegó la tarea en su colega Luis Rapelli, que por esos años era el administrador de los ferrocarriles. Rapelli dispuso que el diseño y la elaboración de este convoy se iniciaran en los talleres que funcionaban en terrenos adyacentes a la estación del ex-Ferrocarril Central Córdoba, de Tucumán.

Pero en 1910, los talleres de Marco Avellaneda y San Martín de la capital tucumana fueron trasladados a los de Tafí Viejo, que ya se habían habilitado en 1907. Incluso entre los elementos transferidos a la fábrica taficeña figuraban dos bastidores del tren presidencial y algunas plantillas correspondientes a sus bogies.

UNIDOS. Alfonsín y Riera, en 1984, compartieron el presidencial en Tafí Viejo. LA GACETA / FOTOS DE ARCHIVO.


En Tafí Viejo continuó la fabricación. Los planos definitivos, a pesar de los diversos inconvenientes que debieron sortear, se completaron y concretaron en todos sus detalles. La construcción del tren presidencial abarcó casi tres años. El convoy, de tres coches y una locomotora a vapor, se terminó en mayo de 1912. Es una gran obra artesanal, concretada por obreros ferroviarios. Fue elaborado con el máximo de lujo y confort. También es el mejor estudiado y construido.

El 9 de Julio de ese mismo año, el vicepresidente de la Nación, Victorino de la Plaza (nacido en Cachi), Salta inauguró el tren en un breve recorrido entre Villa Muñecas y los cuarteles del otrora Regimiento 19 de Infantería.

Una obra de arte de los ferroviarios

Maderas de cedro, roble, petiribí y palo santo, extraídos del chaco salteño, se emplearon en la fabricación de los tres coches del tren presidencial. El G1 es un dormitorio con una pequeña sala de estar; el G2 un comedor, y el G3, cocina. Los pintores plasmaron en el interior y los techos un trabajo tal que los hizo parecer obras de arte del siglo XIX, traídas de Francia.

EL BALCON. Nadie sabe si se construyó con el tren o fue agregado después. LA GACETA / FOTOS GENTILEZA DE SECCION FOTOGRAFIA DE FERROCARRILES ARGENTINOS.


Alfombras y cortinados, de incomparable belleza, fueron donados por "Los Gobelinos". Los vitraux, aplicados en dinteles con forma de arco que coronan las ventanillas laterales, se trajeron de Gran Bretaña. Incluso fueron reproducidos por artesanos argentinos, para prever cualquier rotura, y las ventanillas poseen una talla del Escudo Nacional.

El coche G1, que en uno de sus extremos exhibe un balcón, es un salón de recepciones recubierto de madera de palo santo, lustrada a muñeca. El cielo raso, de pino blanco, fue tallado con estucado blanco. Los muebles de palo santo; sillas y sillones tapizadas con cuero Velcuté color habano. La suntuosa decoración incluye cortinados de seda verde, con flejes de oro y alfombra tipo calchaquí. Además, el despacho presidencial fue adornado con pinturas de artistas tucumanos anónimos y los paneles superiores se forraron con papel tekko japonés. El techo, decorado con cartón piedra, incluye adornos metálicos dorados a fuego, un cortinado verde con flejes de oro y alfombra tipo calchaquí. El escritorio presidencial, de roble labrado, fue lustrado a mano. El dormitorio, revestido en madera de maple claro de Mendoza -tallada y lustrada manualmente-, posee una cama de bronce labrado, sábanas de hilo italiano, fundas con el Escudo Nacional y cubrecamas bordados por las carmelitas.



Los dormitorios de acompañantes están revestidos con madera de tarco tucumano -tallado y lustrado a mano- y de maple rosa mendocino -tallado y lustrado a mano-. El baño, equipado con todos los sanitarios, se caracteriza por la bañadera. Al igual que los otros dos toilettes del coche, se revistieron en chapa opaca de aluminio y piso forrado con una placa de goma.

Desde el andén

Destino actual.- El tren presidencial de trocha angosta actualmente es exhibido en el Museo Quinta 17 de octubre, en la ciudad de San Vicente, provincia de Buenos Aires. La formación se encuentra bajo techo, en una réplica de estación construida para preservar a esta joya ferroviaria de casi un siglo de antigüedad.

GIRA. En 1945 el entonces coronel Perón realizó una gira en el tren al Norte.


Primer viaje.- El 9 de julio de 1912, el presidencial realizó el viaje inaugural. Desde la estación Muñecas hasta las dependencias del otrora Regimiento 19 de Infantería. Fue invitado de honor para esta travesía el entonces vicepresidente, Victorino de la Plaza.

Importados.- La locomotora que se encuentra en el museo es una Kitson de 1889, rodado 4-6-0, que fue restaurada y donada por los talleres de Laguna Paiva para poder completar la formación y mostrar al público el tren completo. La máquina que arrastraba al tren es una Baldwin B12A, rodado 4-6-2, número 3025. Poseía un silbato muy particular y agudo para diferenciarla del resto. Hoy está en Cruz del Eje con graves faltantes, producto del abandono.

ESCRITORIO. Es de roble y está en el despacho presidencial del tren.


Viajeros.- Desde su creación el tren fue pensado únicamente para el uso presidencial, de la familia directa y de la comitiva. A lo largo de los años viajaron en él mandatarios como Bernardo de Irigoyen, Agustín Pedro Justo, Ramón Castillo, Pedro Pablo Ramírez (de facto), Edelmiro Farrell (de facto), Juan Domingo Perón, Arturo Frondizi y Humberto Illía, entre otros. Raúl Alfonsín fue el último presidente que utilizó esta formación en 1984 para reactivar los talleres de Tafí Viejo. El tren dejó de circular en 1985.

Coche G2.- Es el coche comedor. El primer espacio corresponde al refectorio presidencial, un salón reservado para seis personas. Luego se accede al restaurante principal, para 32 personas sentadas. Las sillas tienen detalles en bronce y están numeradas; posee llamadores y distintos tipos de iluminación. Los techos son los más lujosos del convoy. Los terminaron muy lujosos, con dorados grabados a fuego y retratos que evocan las épocas imperiales. El coche comedor ofrece un bar, con modulares para guardar vajilla y botellas. La barra cuenta con un cloque (barra) macizo, de ónix de San Luis.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/569216/sociedad/made-in-tucuman-incomparable-tren-presidencial-trocha-metrica.html


viernes, 1 de noviembre de 2013

El año en que la tristeza devastó a Tafí Viejo

Viernes 1 de Noviembre de 2013.


Alberto Horacio Elsinger
LA GACETA
aelsinger@lagaceta.com.ar


Hace más de 33 años, Ferrocarriles Argentinos disponía el cierre definitivo de los talleres ferroviarios taficeños. Quedaron sin trabajo 1.646 empleados, de los cuales 1.380 eran obreros. Algunos se acogieron al retiro voluntario y otros fueron tentados con vacantes en los talleres de Laguna Paiva y San Cristóbal, ambos en Santa Fe. Se pagaron $25.000 millones en concepto de indemnizaciones.

DESOLACIÓN. La noticia del cierre caló hondo en el personal de los talleres. De pronto todo se paralizaba y el gigante ferroviario entraba en un letargo de cuatro años. Nunca más fue igual. LA GACETA / FOTOS DE ARCHIVO.


"Tafí Viejo posee una población flotante, que va y viene de la ciudad. Y los talleres son un mundo febril donde el hierro candente, las maderas de construcción traídas de la selva inmediata, la fragua, el yunque, el martillo, la sierra y el músculo del hombre forman un conjunto vigoroso y plutónico que no se aquieta: un mundo obediente al impulso de la ciencia mecánica. Allí un pintor del trabajo humano y un poeta de épica civil tendría mucho campo para su obra", expresa el escritor, catedrático y periodista riojano César Carrizo (1889-1950), en su ameno y documentado libro de viajes Imágenes del país, que escribió en 1937.

Fascinado

Carrizo, medularmente romántico y apegado a los temas nacionales, se fascinó con la ciudad ferroviaria devenida en "capital del limón". El riojano, escritor de gran oficio que en su época conquistó muchos lectores mediante la fórmula fácil de una construcción dramática de tipo directo, sin complicaciones innovadoras de ninguna naturaleza, también cuenta que un anónimo acompañante le susurró al oído: "el trabajo de estos hombres es lo que da vida al pueblo, aunque algunos obreros tienen ideas avanzadas".

Ideas claras

Carrizo, según su texto, no sabía si sonreír o asombrarse por la confesión. No obstante, le respondió: "los que allí trabajan sólo se ocupan de ganar su jornal. Además los tiempos no son propicios a las doctrinas disolventes. Asimismo, las ideas, cualquiera sea la mente donde se originen, nacen de por sí con alas, como los pájaros. Vale decir con el predestino de trasponer la línea del horizonte casero en busca de ese más allá que todos sueñan, desde el peón hasta el industrial, desde el estadista al poeta... Aparte, las ideas no son malas, sino cuando se ahogan en el círculo de hierro de los 'ismos' de derecha o de izquierda".

QUIETUD. Dos vagones tanques entre los yuyos y la fábrica inmóvil.


Ambas descripciones definen a a Tafí Viejo y a sus talleres ferroviarios como un orgullo del trabajo y de la técnica nacional. Curiosamente, en el primer semestre de 1980, el año en que se cerraron definitivamente los talleres taficeños, y en particular abril y mayo, lejos de mostrar una planta fabril en decadencia, inactividad o producción en baja, fueron los mejores de esa época.

El viernes 3 de julio los rumores se transformaron en hechos. "Por todas partes podía verse personas reunidas en consulta, o comunicando intenciones, haciendo números en improvisados pizarrones y los que caminaban hacia las oficinas de la administración, con poco apuro, lo hacían porque iban a presentar sus renuncias", dice LA GACETA del sábado 4 de julio de 1980. Además, cabe recordar que la planta teóricamente seguía trabajando, ya que no había una orden en contrario y también, alguno que otro trabajo se hacía.

En Tafí Viejo y su taller, el doctor Francisco Roldán explica que "el martes 8 de julio del 80 se celebró una reunión en el salón de actos del primer piso, de la estación ferroviaria Central Córdoba. Además de todas las autoridades ferroviarias de Tucumán y de los cinco obreros que por sección representaban a sus compañeros, también estaban todos los integrantes del gremio ferroviario. Un hombre joven, bajo, muy inteligente, sereno y de una singular sencillez, el contador Hugo Jorge Carassai -presidente de Ferrocarriles Argentinos-, después de darles la mano a cada uno de los presentes, ocupó el sillón central e informó las medidas".

Ningún jerárquico formuló preguntas. Pero del sector obrero llovieron los interrogantes. ¿Por qué se cierra un taller tan bien equipado? ¿Por qué tiene que desaparecer una fuente de trabajo como los talleres taficeños?

Medida estudiada

"Carassai -añade Roldán- respondió que el cierre no era una medida apresurada, sino por el contrario, fue muy bien estudiada por un equipo técnico competente. Además el monto de la indemnización -$1 millón por año de servicio, más los beneficios que le pudieran corresponder a cada obrero, era el doble de lo que correspondía por excedente de previsión con motivo de la clausura, ya que estaba destinada a paliar las dificultades que tenían que afrontar los renunciantes".

SOLO TECHOS. Una vista aérea de 1984 cuando el cierre era ocultado.


En declaraciones a LA GACETA del 9/7/80, Carassai informaba oficialmente que los talleres taficeños se iban a desactivar hasta diciembre de ese año. Y entre las causas explicó que "se trata de un taller especializado en su mayor parte en la reparación de locomotoras de vapor, lo que no tendrá utilidad práctica dada la dotación total de locomotoras diesel previstas para este año en la línea".

También puntualizaba que "Tafí Viejo tiene sectores y naves que hace muchos años se emplearon en la fabricación de coches y vagones y donde ahora se repara material como vagones tanques y metálicos en general".

DESDE LA CHIMENEA

- VISITANTE.- Seis años antes del cierre, el viernes 26 de abril de 1974, visitó los talleres taficeños, el otrora líder radical Ricardo Balbín. En la oportunidad "El Chino", como lo apodaban sus pares y antagónicos de la política, dijo que "espero que este lugar de trabajo dure en el tiempo, porque hace honor al esfuerzo de los argentinos".

- OTRA CAUSA.- "Para la línea Belgrano, de trocha angosta, se ha previsto que la reparación de locomotoras se haga en Córdoba; la de vagones, guinches y calderas en Laguna Paiva, Santa Fe, y la de coches de pasajeros y coches motores, en San Cristóbal, también en Santa Fe. Por ello se desactiva Tafi Viejo", explicó el contador Carassai, máximo ejecutivo de Ferrocarriles Argentinos.

- PLAZO.- Hasta el 17 de julio de 1980 el personal de la planta ferroviaria debía responder si aceptaba o desechaba el retiro voluntario. Quienes queden prescindibles con posterioridad a esa fecha, por la paulatina desactivación de la fábrica les abonaron una indemnización ordinaria de $500.000 por año de antigüedad. Sólo 62 personas cobraron el retiro voluntario el viernes 11 de julio de 1980, fecha del primer pago para quienes optaban por esa variable.

- OTRA FUENTE.- Según el doctor Roldán, 1.552 operarios habían optado por la indemnización. Los que quedaron afuera afectados a tareas diversas y los administrativos fueron reubicados. Tampoco querían hacer grandes inversiones adicionales de capital para trasladar a las líneas de producción.

- LAS CHORVITAS.- "Aunque sigue teniendo defensores y en otros países aún las siguen usando, por sus muchas ventajas, entre ellas su durabilidad, Tafí Viejo se despidió de las pequeñas máquinas a vapor de maniobras, llamadas chorvitas. Algunos recuerdan a las series trescientas, setecientas, ochocientas, la imponente "presidencial", totalmente niquelada, las mil trescientas, de rodado alto y bajo, las mil ochocientas, las norteamericanas, húngaras, checas, las Henschel, las Skoda, las Garratt, en su tiempo irremplazables para la montaña. Y las 100 y 101..." Todas están en la memoria prodigiosa de Carlos Coronel di Fazio.

http://www.lagaceta.com.ar/nota/566353/sociedad/ano-tristeza-devasto-tafi-viejo.html



_________________________________________________________________



Alfonsín reinstaló la esperanza

El 3 de agosto de 1984 fue un sábado de gloria para los taficeños. Ese día reabrieron la fábrica.

MULTITUD. En la reapertura hubo banderas y militantes de varios partidos. LA GACETA / FOTO DE ARCHIVO.


"No todo lo que brilla es oro", dice el refranero popular. El dicho, relacionado con las apariencias que engañan, siempre está vigente. Mas aún cuando hay anuncios que suelen despertar la algarabía de una comunidad que sufrido impactos sociales y despojos de su principal fuente de trabajo, que otrora no sólo fue orgullo de la provincia sino del país ferroviario. Es el caso de loas talleres de Tafí Viejo. Dejaron de funcionar en forma paulatina, a partir de 1977 y en 1980 se decidió su cierre definitivo. Pero a cuatro años de esa desdichada decisión la fábrica ferroviaria fue reabierta con el retorno de la llegada de la democracia, en 1984.

En 1994 la planta ferroviaria fue transferida a la provincia y un año después, durante la administración de Antonio Bussi, fue cerrada otra vez. En 2003, se produjo la reapertura parcial durante el gobierno de Néstor KIrchner. Y en octubre de 2008 fueron lanzadas las obras de refracción anunciadas por la Nación en la nave de vagones de los talleres taficeños.

Lo cierto y concreto es que la fabrica ferroviaria nunca volvió a funcionar a pleno, como en sus épocas de oro, aunque en los últimos tiempos comenzó a diversificar y a acrecentar su actividad.

El 3 de agosto de 1980, el presidente Ricardo Alfonsín reabrió los talleres de Tafi Viejo, en un acto multitudinario realizado al mediodía de ese sábado.

LA GACETA del 4 de agosto de 1984 -ejemplar del 72° aniversario de nuestro diario- consignaba que el primer mandatario llegó hasta el playón de los talleres en el tren presidencial. "Alfonsín arribó al lugar acompañado por el gobernador Fernando Pedro Riera, junto a la comitiva nacional, legisladores e invitados especiales. La presencia de banderas y carteles de peronistas, radicales, comunistas, intransigentes y de las Madres de Plaza de Mayo daban un marco multicolor".

El gobernador Riera destacó, entre otros conceptos, "Dios intercedió ante el corazón de Raúl Alfonsín, para hacer posible la reapertura del establecimiento en un día de primavera y en paz, comprensión y unidad".

Alfonsín recalcó que "es Tafí Viejo el que abre los talleres. Esto es la obra de todos, no de un gobierno. Es la obra de la democracia".

http://www.lagaceta.com.ar/nota/566354/sociedad/alfonsin-reinstalo-esperanza.html?origen=notarel